viernes, 22 de abril de 2016

MOUSSE DE FRESAS

Hola cocineritos míos:
Acabo de pasar esta receta a mi hermana y me he dado cuenta que os tengo a dieta últimamente, jijiji.
Así que me he dicho, no dilatemos más la recuperación gastronómica de mis amigos.
Sabéis que las fresas se comen solas, con leche, con nata, con zumo de naranja, etc...Pero hoy os traigo una mousse, que suena muy francés y bueno, aunque mi vajilla muy chic no es  ( jijijiji), vosotros podéis poner este postre en unas copas de cristal, unos cuencos bonitos o lo que se os ocurra que le de ese toque para que vuestros invitados o la pareja se sorprenda: ¡ay va, la leche, me voy a comer un postre de categoría! ¡y yo que pensé que mi Pepito sólo sabía pelar un plátano!o en su caso: ¡ y yo que creía que mi Virtudes era una matemática de excepción, pero que esto de la cocina no le iba nada!
Vale, yaaaaaaaaaaaaaaaaa, no me enrollo más.
Sólo deciros que es sencillo del todo.

INGREDIENTES ( da para 6 personas normales o 4 golosos )

- 1/2 kg de fresas
- 5 cucharadas de azúcar ( cucharas de sopa)
- 200 grs de nata de montar
- 3 claras de huevo
- 1 pizca de sal ( para que se monten bien las claras y no se bajen)

ELABORACIÓN

Se lavan las fresas, se parten a la mitad o enteras, como queráis porque se van a triturar. Yo las parto por facilitar la labor a mi batidora. Se baten sin nada, sólo las fresas. Se dejan en un cuenco grande, porque luego se irá mezclando el resto de cosas.
Batid la nata hasta montarla con dos cucharadas y media de azúcar ( de las soperas, ya dije). Se mezcla con movimientos envolventes la nata con las fresas. No os pongáis a batir como locos que luego se os puede bajar la nata. Un poco de por favor...delicadeza!
Se cogen las claras ( las habréis separado de las yemas con cuidado de no caer ni una gota de yema o no os subirá el merengue). se baten con varillas o a mano ( una servidora no tiene aparato, con lo cual con un tenedor). En cuanto estén algo espumosas se le echa una pizca de sal y se sigue batiendo. Subirán las clara y en ese momento añadir las otras dos cucharadas y media que quedaban de azúcar.
Se mezcla con lo anterior también con movimientos envolventes, suaves.
Se echan sobre los cuencos individuales o copas de cristal y se adorna con un trocito de fresa.
Mirad, con esas cantidad de azúcar queda lo suficientemente dulce, tampoco tanto, dado que la fresa ya sabéis que tiene cierta acidez; pero os dejo a vuestro libre albedrío echarle menos ( yo no lo haría, al menos no con las fresas que yo compré).
Se meten en el frigo hasta que sea la hora del postre.








































No hay comentarios:

Publicar un comentario